Métrica y compás musical

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Métrica y compás musical

 

Métrica y compás musical

Además de la altura y la duración de los sonidos, incluso se puede representar gráficamente el ritmo y el tiempo de una pieza musical, lo cual se hace a través del compás musical y de la métrica.

El compás musical es la representación gráfica de un segmento de una partitura que se repite; se representa gráficamente a través de líneas divisorias verticales dibujadas en el pentagrama desde la primera línea hasta la quinta, llamadas líneas divisorias o barras de compás. El espacio que hay entre las diferentes líneas divisorias es a lo que se denomina compás musical.

Métrica y compás musical

El compás musical permite dividir el tiempo de una canción o pieza musical en partes iguales, indica el tipo de ritmo que tiene la pieza musical y permite al mismo tiempo dividir el ritmo en tiempos fuertes y débiles.

El compás puede contener cualquier tipo de figuras musicales independientemente de su duración, pero la suma de estas figuras dará siempre el mismo valor, independientemente de la cantidad de partes que contenga.

Métrica y compás musical

Cuando nos referimos a la métrica, es importante tener muy claro el significado de los términos: tempo, pulso y beat. Cuando hablamos de pulso o beat, nos referimos a la sensación que tenemos de llevar el tiempo con el “pie” cuando escuchamos una canción.

Cada golpe que damos con el pie equivale a un pulso en la música. Dependiendo del género de música que escuchamos, estos golpes pueden ser más rápidos o más lentos; el tempo se refiere a la velocidad con que se ejecutan estos golpes (pulsos). Si el tempo es igual a 60, quiere decir que se ejecutan 60 pulsos cada minuto, si el tempo es iguala 120, significa que se ejecutan 120 pulsos por minuto.

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Por lo tanto, la métrica se refiere a la forma de organizar los pulsos y el tempo en una obra musical, dividiendo los pulsos en pequeños grupos (los compases) y definiendo en cada compás cuales pulsos deben sonar más fuertes y cuales más débiles (acentos fuertes y débiles) para dar un sentido rítmico a la música.

La representación gráfica de la métrica, se hace a través de una fracción que se escribe al comienzo del pentagrama después de la clave. El numerador de esta fracción, o el número ubicado en la parte superior, indica cuantos tiempos o beats contiene cada compás. El denominador, en cambio, indica cuánto dura cada tiempo y cual la figura que se usará como referencia.

Métrica y compás musical

Existen diferentes tipos de compases musicales y se clasifican de acuerdo al tipo de fracción que los identifica. La diferencia entre un tipo u otro, depende de cuales son los acentos fuertes y los acentos débiles que conforman el compás. 

Para entender mejor todo esto, debemos recordar cuales son los números que representan las figuras musicales:

Redonda = 1  (porque se usa como referencia para las demás notas)

Blanca = 2 (porque se necesitan dos blancas para hacer una redonda)

Negra = 4  (porque se necesitan cuatro negras para hacer una redonda)

Corchea = 8 (porque se necesitan dos ocho corcheas para hacer una redonda)

Semicorchea = 16 (porque se necesitan dieciséis semicorcheas para hacer una redonda)

Fusa  = 32  (porque se necesitan treinta dos fusa para hacer una redonda)

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Por esta razón, si se observa en un compás que el denominador, o número de abajo, es un 2, quiere decir que la figura de referencia de cada pulso es la blanca. Si se observa que el número es un 4 significa que la figura de referencia de cada pulso es la negra, es decir, que cada negra dura un tiempo. Si se observa un 8, la figura de referencia es la corchea, por lo que cada corchea representa un tiempo en ese tipo de compás.

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Por lo tanto, si tenemos una fracción de 4/4, eso nos indica que cada compás puede contener cualquier tipo de figura musical, pero la suma de estas será siempre equivalente a 4 negras.

Métrica y compás musical

 Se puede facilitar la labor de un músico usando un tipo de compás denominado compás simplificado. El compás simplificado se refiere al uso de un símbolo parecido a una C mayúscula en lugar de escribir el cuatro por cuatro, donde cada compás debe tener cuatros tiempos.

De igual forma, se puede escribir el símbolo de una C mayúscula atravesada por una línea vertical en lugar del dos por dos, por lo tanto, cada compás debe tener dos tiempos.

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e igual forma, se usa el símbolo de una C mayúscula atravesada por una línea vertical para representar un dos por dos, es decir, un compás en el que la figura de la blanca representa el tiempo.

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Cuando una pieza musical comienza con un cuatro por cuatro y pasa a un dos por dos, las mismas figuras musicales durarán la mitad, dando la impresión que duplicaron su velocidad.

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